España hace piña: «Juntos más que nunca»
Susto. Esa la sensación que se palpaba en el vestuario de la selección española minutos después de haber terminado el partido contra Japón. España estaba en octavos de final, pero nadie celebraba. No había motivos para ello. El combinado nacional vio como los nipones les remontaban e, incluso, llegaron estar seis minutos fuera del Mundial. Luis Enrique estaba muy enfadado por lo visto sobre el terreno de juego y sus futbolistas eran conscientes de que no habían estado a la altura. Horas después de lo ocurrido y con la tranquilidad que da el saber que siguen con vida en esta Copa del Mundo, la plantilla ha hecho autocrítica y se ha unido aún más si cabe para seguir luchando por el sueño de la segunda estrella.
«Juntos más que nunca», fue una de las frases que salió del vestuario español tras lograr el pase a octavos de final como segundos de grupo. España sabe que no estuvo bien, que se vio superada por un combinado nipón que en 10 minutos desactivó a los de Luis Enrique, pero también son plenamente conscientes de que, puestos a tener accidentes, mejor que haya sido cuando todavía había red y no a partir de las eliminatorias, donde desconexiones como las vividas ante los japoneses te mandan para casa.
Desde la Qatar University de Doha ya sólo piensan en Marruecos y una eliminatoria de octavos de final que no será para nada sencilla. Luis Enrique y sus chicos ya están avisados. Por eso, el combinado nacional ha hecho autocrítica, no se centran en acciones polémicas como la del segundo gol de Japón y sí en mejorar y seguir creciendo en otros aspectos puramente futbolísticos. No quieren ningún tipo de distracción y sólo buscan crecer en su fútbol.
España tiene por delante cinco días para centrarse y darse cuenta lo que falló ante Japón. A pesar de la sensación de que no estuvieron a la altura en una segunda parte para olvidar donde, como explicó el propio Luis Enrique, entraron en modo colapso. Ahora, en el horizonte espera Marruecos, una de las revelaciones del torneo, y desde el vestuario español están centrados en hacer las cosas bien para avanzar a cuartos.